El italiano, de 29 años, cinco veces campeón del Mundial de MotoGP, no había ganado nada desde el Gran Premio de Portugal de septiembre de 2007, una sequía poco común en este piloto, que, por otra parte, ha firmado su 63ª victoria en la categoría reina.
Tras su triunfo, el italiano dejó la pista, besó su moto, y sentándose en una barrera cercana a boxes, dirigió una gran sonrisa a la multitud.
"Estoy muy, muy contento. Hacía mucho tiempo que no ganaba", declaró el flamante piloto italiano.
En la clasificación del Mundial, Rossi permanece tercero, con 72 puntos, lejos del líder, Dani Pedrosa, 81 puntos, y cerca de Jorge Lorenzo, 74 puntos, que logró terminar cuarto en la carrera a pesar de sus lesiones.
Ya vencedor en Shanghái en 2005, Rossi se impuso a Pedrosa tras luchar en una pista muy húmeda. El italiano se colocó en cabeza de la carrera en la cuarta vuelta, adelantándose a Pedrosa, que quedó tres segundos por detrás de él al final de la carrera, mientras que Stoner, vigente campeón del Mundial, llegó a 15 segundos.
El español Jorge Lorenzo, de 21 años, debutante en la categoría, consiguió una complicada cuarta plaza, que consideró "como una victoria", pues tiene el tobillo izquierdo fracturado y múltiples contusiones en la pierna derecha, después de una caída espectacular en los ensayos libres del viernes.
El estadounidense Colin Edwards, autor inesperado de la "pole position", sólo logró una séptima plaza.
Para Rossi se trata de un merecido premio, pues dominó los ensayos del viernes y el sábado, antes de dejarse arrebatar la "pole".
"Me he sentido confiado con mi moto desde la primera vuelta. La salida no fue mala y desde que me puse en cabeza guardé mi ritmo. Ha sido una bonita lucha con Dani (Pedrosa)", dijo el italiano.
Pedrosa, por su parte, reconoció la superioridad de su rival.
"Era una carrera difícil... al final, porque he visto que no le podía adelantar", declaró el español, de 22 años, subcampeón del mundo el año pasado.
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