Las lágrimas que Leo Messi derramó sobre el césped del Camp Nou al marcharse lesionado en el minuto 38 del partido ante el Celtic hacían presagiar algo malo. Por desgracia, las sensaciones negativas que sintió el delantero argentino tras su corto sprint se confirmaron ayer tras las pruebas médicas a las que se sometió.
Leo Messi, el jugador más en forma de la delantera del Barça, estará de baja las próximas seis semanas a causa de una rotura en el tercio proximal del bíceps femoral de su muslo izquierdo. O lo que es lo mismo, se perderá el tramo decisivo de la temporada al no poder jugar seis partidos de Liga, la vuelta de Copa ante el Valencia y la posible final, así como los cuartos de la Champions League. Si se cumplen los pronósticos de la recuperación, el crack azulgrana podría regresar a tiempo de disputar la ida de las semifinales de la Champions, previstas para el 22 y 23 de abril, siempre y cuando el equipo consiga clasificarse.
Impaciente por conocer el alcance de su lesión, Leo Messi apareció a las nueve de la mañana en las instalaciones del Camp Nou acompañado por su padre. Aunque en un principio estaba previsto que el jugador se sometiera allí a diversas pruebas médicas, finalmente lo hizo en la clínica Asepeyo de Sant Cugat, donde también acudió con el doctor Ricard Pruna. Pasadas las 12 del mediodía, Messi salió del centro médico con cara de resignación. Por cuarta vez, la segunda esta temporada, el argentino comprobaba cómo uno de sus bíceps femorales -en esta ocasión el izquierdo- le jugaba una mala pasada.
En la temporada 2005-06, la del doblete, el argentino no llegó en plenas condiciones para disputar la final de París después de estar de baja dos meses y medio por una rotura fibrilar en su bíceps femoral de la pierna derecha que se produjo en la vuelta de los octavos de Champions ante el Chelsea. El mismo músculo lo tuvo parado anteriormente aquella campaña otras dos semanas.
Este año le ha tocado vivir el mismo infortunio pero en la otra pierna. Antes de lesionarse el martes, Messi ya había estado parado cinco semanas por una rotura fibrilar que se produjo en el choque de Liga en Mestalla ante el Valencia.
Anímicamente muy tocado por verse fuera del equipo en el momento más decisivo de la temporada, Leo Messi empezará a partir de hoy su recuperación. Aunque ayer todavía no se había decidido cuál será el plan que seguirá, no está descartado que Messi pueda desplazarse a Argentina.
Hace dos temporadas, y teniendo en cuenta el revuelo mediático que despertaba su recuperación, el jugador, con el permiso del club, optó por desplazarse a su ciudad natal, Rosario, para trabajar con más tranquilidad
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