Desde el 1991 el Real Madrid no lograba ganar en el fortín coruñes. Esta vez la magia de las meigas no pudo contrarrestar la pegada de los merengues que aún sin Cristiano, dominó el partido de cabo a rabo.Una actuación estelar del ariete galo Karim Benzema acompañado de un rejuvenecido Guti y un Granero que llama a las puertas de la titularidad dieron la victoria al Real Madrid en Riazor por 1-3.
En el minuto 13 de partido Esteban Granero aprovechaba un error en el despeje de la defensa gallega para rematar a las mallas un potente cabezazo ante el que no pudo hacer nada Aranzubía.
Hacia el final de la primera mitad, Guti recibe un pase en el área pequeña y con un taconazo engaña a todos los espectadores, incluidos los defensas deportivistas que miran impotentes como llega por detrás Karim Benzema para introducir el balón en la red del equipo coruñés.
La segunda parte comenzaba con dominio de los madrileños con el Deportivo al contragolpe haciendo daño por las bandas en las que se echaba en falta la presencia de Filipe.
En una de estas internadas del Deportivo llegó su gol, en el minuto 86, Riki daba esperanza a la afición gallega al convertir con un duro disparo un penalti provocado por Sergio Ramos. Aunque Casillas adivinó la trayectoria del balón e incluso logro tocarlo, la potencia con la que volaba el esférico le impidió blocar el penalti.
Pero al Deportivo a raíz del gol, empezó a descuidarse y Granero dio un gran pase a Arbeloa que le puso en bandeja el gol de la sentencia a Benzema y este no falló, con un disparo cruzado logro batir por segunda vez a Aranzubía y romper la maldición que poseía el Real Madrid desde hace casi dos décadas en el estadio coruñés.
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